
La formación cristiana y vocacional requiere, como un elemento esencial, de una vida espiritual y sacramental sólida.
En el Seminario Menor tenemos, a disposición de la comunidad, un oratorio-capilla, situado cerca de la zona de estudio y residencia, de modo que sea accesible en cualquier momento del día. Así mismo, utilizamos a veces la Capilla del Seminario Mayor y, para las grandes solemnidades, la Capilla Mayor del Seminario Diocesano, en la Planta Baja.
Cada seminarista tiene su sitio asignado en la capilla de su comunidad, y todo su material (libro de oración, cantoral, evangelio diario, biblia) a disposición en su lugar.